La moda (del francés, mode y éste del latín, modus, modo o medida) indica en su significado más amplio una elección o, mejor dicho, un mecanismo regulador de elecciones, realizadas en función de unos criterios de gusto. La moda son aquellas tendencias repetitivas, ya sea de ropa, accesorios, estilos de vida y maneras de comportarse, que marcan o modifican la conducta de una persona. La moda en términos de ropa, se define como aquellas tendencias y géneros en masa que la gente adopta. La moda se refiere a las costumbres que marcan alguna época o lugar específicos, en especial aquellas relacionadas con el vestir o adornar.
Desde principios del siglo XX ha habido grupos de jóvenes que se han manifestado abiertamente en contra de esas modas, formando lo que se ha llamado contracultura, pero estas formas alternativas y combativas frente al stablishment se han convertido, una y otra vez, en aquello a lo que criticaban o en su defecto, el capitalismo las ha reconducido hasta hacerlas manifestaciones menos peligrosas para su status quo, es decir, domándolas. ¿Cómo se ha hecho esto? Muy fácil, poniendo de moda aquellos signos característicos de esa contracultura, quitándoles así su fuerza originaria. ¿Ejemplos? La cresta mohawk, el pelo largo, las chupas de cuero, los pantalones de pitillo, las camisas de cuadros, etc. El mayor problema que acarrean las modas es que convierten a sus enemigos en parte del sistema, anulando completamente la fuerza de estas corrientes.
No es sencillo definir o acotar quienes son los responsables de esto, y ello puede sonar a una paranoia conspiracionista, pero no hay ninguna duda de ello. Una de los mecanismos que se emplea son los medios de comunicación, desde los mas generalistas hasta los mas “especializados”, todos ellos están repletos de propaganda. En los de gran audiencia, como por ejemplo, los 40 criminales o la MTV, la música no es mas que otro producto y se vende como tal, pero en el paso concreto del punk, por volver al ejemplo anterior, es cierto que se muestra como un elemento contracultural, pero al ser emitido desde esos canales es evidente que niega su condición al banalizarla. Pero la gran parte de los medios “underground” también caen en ello, aunque de una forma diferente pero casi peor y me explico: en este tipo de publicaciones podemos ver las últimas tendencias dentro de los géneros musicales, o del tipo que sea, que se presentan a si mismos como contraculturales, pero el mero hecho de presentarse en este tipo de medios niega su condición precisamente por que el dinero que le permite a la revista publicar una entrevista en la que un artista critica el capitalismo, es la marca de zapatillas que pone su anuncio en la contraportada de la misma revista, y que explota a niños en el sudeste asiático para recortar gastos, por utilizar un ejemplo frecuente y no muy rebuscado. Por ello incluso ser punk es una moda y por ello hay que acabar con el punk. Sólo cuando un movimiento cultural se mantiene en todo momento al margen de ese pólipo fagotizador que es el capitalismo, puede mantener intacta su integridad. Es cierto, que en muchas ocasiones no es el colectivo el responsable de esa Aufhebung, si no que el capital se apropia de ello, sin mas, sin avisar a nadie, por ello, si no se forma parte de nada, sólo buscando la mas absoluta neutralidad estética se conseguirá no formar nunca parte del negocio y poder combatirlo.