Conocí a un tío que era un poco mas pequeño que yo, tendría veintipocos años. En cuanto le dije que yo era español se puso a hablar en castellano conmigo, muy fluido y con poco acento. Le pregunte que porque hablaba español tan bien y me contó que estuvo viviendo en Barcelona durante un año, trabajando de albañil, con una chica que había conocido el año anterior en Portugal, a donde había ido buscando el buen tiempo.
Él limpiaba afanosamente la cocina de mis amigos, allí es donde le conocí, mientras Igor terminaba de ducharse y antes de que fuésemos a comernos unas salchichas que yo había comprado. Me pareció bastante curioso porque apenas movía el brazo derecho, estaba haciendo un millón de cosas a ala vez y solo con el brazo izquierdo. Tenía un cigarro de liar, sin filtro, como los que fuma la mayoría de la gente en Bélgica, apagado en la comisura del labio. Hablaba y limpiaba sin parar. Me dijo que iba a dormir unos días allí, así que quería que estuviese todo limpio, para también poder trabajar tranquilamente, mas cómodo, sin olores ni moscas. Él estaba escribiendo un libro.
Llevaba el pelo corto, despeinado, le faltaba un diente, no recuero exactamente cual, pero estoy seguro de que le faltaba uno. Llevaba una camiseta verde oscuro, con un bolsillo en el pecho, en el que tenia varias cosas: un boli, un mechero... no sé, y algo mas. Seguía limpiando mientras hablaba sin parar, era muy agradable. Cuando llego Igor también empezó a contarle cosas, como si fuesen colegas desde hacia tiempo. Pero yo sabia que Igor tampoco le conocía, porque cuando el chaval estaba haciendo algo, mi amigo me miraba con una cara de extrañeza y levantando los dos hombros muy rápido, como preguntándome si sabia quien era ese chico. De todas formas, cuando Igor llegó, el chico escoces, Marc, se puso a hablar en ingles, con mucha educación. Era muy educado y muy interesante. Yo quería saber como había decidido que su vida no podía quedarse parada en un sitio concreto y que no iba a aceptar toda la mierda y todas las ataduras que nos impone la sociedad, nuestros padres, nuestros amigos, los amigos de nuestros padres y los padres de nuestros amigos. Quería preguntarle también, que iba a hacer dentro de 3 años y dentro de 15 y si no le gustaría tener una casa y casarse algún día. La verdad es que me imagine las respuestas y me callé, para evitarme el hecho de quedar como un niñato, supongo. Así que traté de demostrar lo contrario, que yo también había viajado y sabía lo que era la vida. Lo cual fué mas lamentable aún. Lo que si que le pregunté es por lo que hacia antes de haberse decidido a viajar y su respuesta me alegro aun mas el corazón, había empezado a estudiar filosofía y fotografía en Glasgow, Joder! Las dos cosas que mas me gustan en el mundo, en una de mis ciudades favoritas! Creía que era una señal y que iba a pasar muchos días a su lado, que nos íbamos a hacer amigos e íbamos a recorrer el mundo juntos. A la mierda todo lo demás! Voy a ser un beatnik! Que lamentable, necesito el empujón de un desconocido para hacer lo que realmente quiero hacer, pero bueno, el caso es que intenté caerle bien sin forzar la situación, así que le ofrecí un trozo de una de las salchichas que me iba a comer y la aceptó. Me di cuenta de que no teniamos pan, asi que fui a comprar. Les pregunte que si querian algo mas, ya que iba a la tienda... Igor no necesitaba nada, pero Marc me pidio una cerveza, le pregunte que si queria alguna en particular y me dijo que no, solo que fuese grande y barata. Sonreí y me fui.
El camino hasta la tienda era corto, pero el rato que pase solo, después de conocer al pibe este, no pare de pensar en mi vida, en todo lo controlada que la había tenido siempre y en que a lo mejor lo que tenia que hacer era quedarme con él y ver lo que iba a pasar. Quizá eso fuese demasiado, pero lo pensé. También se me paso por la cabeza el hacer algo así pero por mi cuenta. Creía que realmente yo no quería ser doctor en filosofía, o que podría serlo pero mas adelante, que tenia que seguir mi instinto y conocer gente y sitios. Ademas eso me haría mas fuerte, el hecho de vivir solo y tener que apañarme las cosas. Dormir en la calle algunas noches, comer poco y apreciar mas ese tipo de cosas. En cierto sentido también seria como una reacción a todas las ataduras que me ha impuesto la gente que me rodea, una situación que respondería a toda la acomodada clase media que me rodea, que no se para a valorar las cosas que le rodean. También pensé que realmente no necesito todas las gilipolleces con las que nos obsesionamos constantemente, no necesito una tele que te cagas, no necesito un móvil de puta madre, ni siquiera un coche, pero a lo mejor mas adelante si que lo quiero o lo necesito, o por lo menos, si algún día tengo hijos, tendré que tener la oportunidad de poder dárselo, no sé, aunque sea un mínimo. Pero bueno, eso también es un gilipollez, no quiero tener hijos y si los tuviese me gustaría educarles lejos de toda esa mierda, que no tuviesen esas necesidades creadas por el capital. Aunque eso seria una putada, porque los niños son muy cabrones, pero mucho, y en seguida, la mínima diferencia la convierten en un error, en lugar de eso, lo que es, una diferencia. Quizá no sean los niños solo, es toda la sociedad y eso es lo que es una mierda. Se que no quiero formar parte de la masa, de la clase media que se acomoda y se deja llevar, eso me parece una mierda. Creo que es mas valiente hacer lo que realmente quieres hacer, ahora, si lo que realmente quieres hacer es eso, pues bueno, adelante, es tu elección. Pero yo se que ahora no quiero hacer eso. Y entonces tampoco quería. Yo quiero vivir.
Compré el pan y le compré la cerveza mas grande que había y mejor y mas cara, pensado en que yo le iba a invitar. Tambien pense que le iba ofrecer mi sofa por si queria pasar unos dias mas en Lovaina hasta que encontrase trabajo. Y volvi a casa, pero estaban hablando de otra cosa y se me olvido comentarselo. Bueno, pero comimos muy bien y el tio nos agradecio mil veces todo. Era muy educado. Nos pidio unos cuantos cigarros y ni siquiera amago con pagarme la cerveza, pero bueno, yo tampoco le iba a pedir el dinero y aunque me lo ofreciese le iba a decir que no, porque yo queria invitarle. Cuando terminamos de comer el escocés se piró a ayudar a otro tio de los que vivia en la casa a mover un mueble nuevo que se habia comprado la madre del tio este. Asi que Igor y yo nos fuimos, no recuerdo a donde, creo que a un parque, a fumar un poco. Entonces le comente a Igor todo lo que se me habia pasado por la cabeza, que queria ser como este tio y mandar todo a la mierda, dedicarme a viajar y a trabajar, a conocer sitios y gente y que mas adelante ya decidiría lo que quería hacer. Mientras se lo contaba Igor se reía un poco de todo lo que yo estaba diciendo, también por que, como hago muchas veces, me ridiculizaba a mi mismo para hacer la conversación un poco mas amena. No se si hago eso conscientemente o no, pero se que lo hago mazo. Bueno, cuando acabe de contarle mis planes me miro fijamente y me dijo que si realmente quería hacerlo que lo debía hacer, pero también me dijo que le parecía un poco tontería, porque era mandar a la mierda una oportunidad muy guapa que yo tenia, que yo me había conseguido con mi trabajo, lo cual es cierto, o por lo menos eso creo. Creo que Igor había percibido en el discurso del tío este un matiz en el que yo no había caído: el egoísmo. Desde luego esa actitud es mejor que la típica del trabajador de una empresa multinacional, que con su pasividad, propia de la clase media, no hace mas que contribuir al crecimiento de ese monstruo económico que esta devorando las vidas de todo el mundo. Pero no es mejor ni mas respetable que la de un verdadero trabajador, de un obrero. Ademas nosotros, como aquellos afortunados que hemos tenido la oportunidad de acceder a unos estudios superiores y que nos mantenemos como librepensadores, tenemos una responsabilidad y unos deberes para con aquellos desfavorecidos que no se pueden defender por si mismos y es nuestro deber denunciar esas desigualdades e injusticias, es decir, aportar nuestro granito de arena en la mejora de esta mierda de mundo. Lo que me estaba diciendo en el fondo es que no podemos desfallecer a mitad de camino, ahogados por el sistema, si no que tenemos que continuar peleando y luchando para poder hacerlo lo mejor posible. Joder! Claro que estoy de acuerdo con eso, y lo mejor de todo es que disfruto haciendo eso, pero también todos aquellos a los que admiro han hecho cosas asi, porque no puedo hacerlo yo también durante un tiempo? No se, y luego, pues ya veremos, no?

Como en las buenas películas, en los buenos relatos, no hay que dar un marco, simplemente exponer lo que esta ocurriendo, para no dudar de la intención del escritor y que este no subestime al lector.
Pero no se como hacer que la cámara tiemble, como hace Pasolini