domingo, 30 de septiembre de 2012

The Brew Dock

Siguiendo con mi ruta cervecil por la capital de Irlanda, mi siguiente recomendación personal es el Brew Dock. Llegué a este pub por recomendación personal del camarero del Against the Grain, del cual ya hablé el otro día. Pues resulta que me recomendó ir al Brew Dock porque los dueños son los mismos, por lo que la idea general es muy parecida y los prductos que ofrece casi los mismos. Aún así siempre hay pequeñas diferencias y aún así, siempre es agradable tomarse algo un poco diferente, al mismo precio que en cualquier otro sitio o incluso un poco menos. Vamos allá...

Este bar está muy bien situado, cerca del centro, en Dublín 1, al lado norte del río, cerca de O´Connell street, una de las principales arterias de la ciudad, así como zona comercial y también muy cerca de Connolly station, una de las 3 estaciones de tren que están en el casco urbano de la ciudad. Como veis, desde fuera parece como cualquier otro pub de la zona, aunque ya se intuye algo al ver las banderas de O´Haras o Erdinger y ninguna de Guinness. De hecho, en el rato en el que he estado, varias personas han pedido una Guinness y en lugar de decirles que no tienen, pero que tienen Stouts mucho mejores, les invitan a irse amablemente sugiriéndoles algún pub cercano en el que si que puedan degustar la famosa stout. No sé si siempre harán eso o no, yo sólo he estado un rato y no estaba prestando atención todo el rato, pero Sinceramente me parece que no es la opción mas inteligente para su propio negocio, pero no deja de tener algo de gracia.

Por dentro ya la cosa cambia un poco mas, tiene, nada más y nada menos que 22 grifos, así como otras dos bombas de mano. En el momento en el que yo estuve tenían un par de Brewdog, tres de Sierra Nevada, alguna un poco comercial, como Erdinger o Grolsch, pero también sidra artesana, Blue Moon y muchas artesanas irlandesas. Evidentemente, de esto último es de lo que yo he tirado... aparte de esto, tienen 3 neveras de cuerpo entero y un par de medio, con cositas ricas de Estado Unidos e Inglaterra, así como algo de alemanas y belgas en botella.
Aparte de eso, como en la mayoría de los pubs locales, tienen la cocina abierta casi siempre y las comidas que sacan tienen bastante buena pinta. El ambiente es agradable, distendido y relajado. Los camareros son majetes y saben de lo que hablan, que eso siempre se agradece...

Como las otras veces, al tener samplers disponibles, he optado por esa opción, por las mismas razones que todas las otras veces. En este caso mis víctimas han sido:

Howling Gale Ale, de Eight Degrees Brewing: se supone que es una American Pale Ale, color dorado claro, poco carbónico, poca espuma de color blanco, ninguna turbidez. Aroma intenso, limpio, predomina la manzana verde, uva verde, vinagre ligero. Muy curiosa, refrescante, poco cuerpo, entra muy bien, mucha manzana verde, más bien seca, algo ácida, retrogusto medio, alcohol muy bien integrado. Más que una pale ale, recuerda un poco a algunas saison, aunque es diferente, interesante.


Spelt Saison de Trouble Brewing, en cask: otra curiosa combinación: si el otro día era Hefe Weizen en cask, ahora saison, los más puristas dirían que sólo por eso ya no puede ser una saison, pero bueno, me gusta probar cosas nuevas y no podía dejar pasar esta oportunidad. Es de color dorado un poco oscuro, con muy poca espuma, ligeramente turbia y muy poco carbónico, lo cual es poco habitual en una saison. El aroma es intenso, curioso, predomina el cuero, frutas dulces maduras, como melocotón o ciruela. De cuerpo medio, bastante dulce, el alcohol no está del todo bien integrado sabor largo, bastante fruta. Me recordaba más a una doble belga que a una saison, pero al margen de ponerse quisquilloso con las etiquetas, está rica, es muy curiosa y está muy bien hecha.

Strange Brew de Galway Bay, de nuevo plantea problemas con las etiquetas, se supone que es una Golden Ale pero es de color rojo intenso, sin nada de carbónico aparente, ninguna turbidez, corona beige claro y consistente, es decir, el aspecto de una Irish Red Ale...aroma escaso, ligero caramelo, de cuerpo medio, predomina el caramelo, pero muy ligero, final seco. Está bien hecha, equilibrada, pero es un poco sosa. Sin más.

Por último, he optado por una cerveza artesana de Belfast, Hilden Cathedral Quarter Beer, una Irish Red Ale, de color naranja rojizo, carbónico medio, ninguna turbidez, y una espuma inexistente de color blanco. El aroma no es muy intenso, sobre todo caramelo, en boca es curiosa, se nota algo de caramelo, pero sobre todo muchísimos frutos secos, nueces, avellanas y almendras, pero de forma muy intensa, es muy curioso, creo que nunca he probado una que supiese tanto a frutos secos.  

Eso es todo, por ahora. Me faltan por visitar un par de templos, espero poder comentar algo de ellos, si merece la pena...


domingo, 23 de septiembre de 2012

Bull & Castle, Dublín

Fachada Bull & Castle
El Bull & Castle es otro de los pubs especializados en cerveza más recomendables de Dublín. Es más grande y menos personal que el Against the Grain, pero aún así está bastante mejor que la Porterhouse, que, desgraciadamente, parece que se ha convertido en un bar para turistas, con muchas cervezas y un ambiente mas o menos agradable, pero con menos alma...

El que nos compete hoy es, básicamente, un local doble: en la parte de abajo un restaurante bastante resultón y un "beerhall", como lo llaman ellos, en la parte de arriba. Está bien situado, cerca del centro turístico, a medio camino entre la catedral de San Patricio y el Castillo de Dublín, por lo que viene bien para tomar un refrigerio entre tanto paseo si estamos de turisteo.

De los dos pisos mencionados, lo que me importa a mí está, evidentemente, en el superior. El local es agradable, grande, espacioso, con techos altos y luminosos y la típica decoración de bar irlandés, paredes de madera y anuncios antiguos de cerveza. Es el típico local deportivo, con varias pantallas grandes y televisiones por todos lados, lo cual lo hace poco agradable para el que se quiere concentrar en el líquido elemento y más si es la final de futbol gaélico, como era el caso de hoy. Hay que decir que, dadas las fechas en las que estamos, estaba todo muy decorado como el Oktoberfest, desde los manteles de las mesas, hasta banderines por todos lados o anuncios de Paulaner.

Respecto a la carta, tiene una buena selección: unos 15 grifos, la mayoría de artesanas irlandesas, pero también Guiness o Heineken mas una bomba de mano cuyo cask van rotando. También tienen una buena selección de botellas, mas irlandesas, algunas yankees, algo belga, alemanas e inglesas. Evidentemente me he quedado con el producto local, porque no he visto nada de otro país imposible de conseguir en los bares o tiendas especializados de nuestra piel de toro.

Como el otro día, me he pedido una muestra de estas que ofrecen que se supone que es para luego elegir la cerveza que te vas a tomar en una pinta. Las cervezas elegidas han sido:

F.X. Buckley Golden Ale: hecha en exclusiva para la casa, es una Golden Ale suavecita, con sólo 3,9% ABV, de color dorado oscuro, ninguna turbidez, carbónico medio, corona escasa y aroma ligero a hierba y a flores. Cuerpo medio, algo de sabor a grano, un toque dulce pero final seco. En general bien hecha y equilibrada, para beber mucho, pero un poco insulsa.

Metalman Pale Ale: de color dorado oscuro, nada turbia, poco carbónico, corona abundante pero poco compacta y persistente, aroma intenso pero poco complejo, más bien limpio, a resina, pino y algo de flores. Cuerpo medio, muy floral pero con una ligera base maltosa, final seco y retrogusto más bien largo. Creo que es la mejor birra irlandesa que he probado, hasta ahora. Un poco rollo Pale Ale americana pero un poco diferente y muy bien hecha, una sorpresa muy agradable.

Castle Red: color rojo intenso, poco carbónico, corona escasa, de color beige claro, algo cremosa, pero no tanto como otras, deja muy buen lacing.  En el aroma predomina el caramelo. Cuerpo medio pero con un sabor muy rico, no demasiado complejo ni intenso, pero mas de las habituales Murphy´s o Smithwick´s, predomina el caramelo, pero de una forma suave y sutil, no empalaga. Retrogusto más bien largo, pero algo seco. Aunque no consigo encontrar nada de info sobre esta birra, he de decir que es la mejor Irish Red Ale que he probado en mi vida sin ninguna duda, espero poder volver a encontrarla...

Eight Degrees Ocht-oberfest beer: tipo Märzen, de color anaranjado cobrizo, carbónico medio, corona escasa, nada turbia. Aroma ligeramente dulce, algo extraño, me recordaba al licor de cereza. Entra bien, redonda y limpia, se nota el grano y algo de dulce pero como artificial, como a chuchería y el alcohol no está bien integrado, a pesar de sólo tener 6,4% de ABV.

Una vez terminado esto y a pesar de las dos gratas sorpresas que me dieron la Metalman y la Castle Red, me decidí por probar una pinta del cask ya que era una creación de Metalman, una de las cerveceras que me había gustado, estaba en bomba de mano (que eso siempre mola) y era una Hefe Weizen, que me encantan, pegaba perfectamente para ocasión y me pareció una cosa rara eso del cask de cerveza de trigo.

Metalman Alternator: El color es el habitual de una Hefe Weizen, amarillo pajizo ligeramente oscuro, muy turbio, quizá más de lo común, con muy poco carbónico, lo cual puede hacerle creer a alguno que no está terminada... corona blanca, compacta pero escasa. El aroma es intenso, a levas, es decir, pan, galletas, etc. y a plátano, como le corresponde. En boca, tiene mucho cuerpo pero es muy fácil de beber, mucho grano pero sobre todo muchísimo plátano. El sabor es largo, y el final más bien seco, dejando un buen retrogusto a lúpulo. Me ha gustado mucho esta cerveza, sé que a los talibanes de las Hefe Weizen les parecerá una aberración, pero es que casi no es ese tipo de cerveza, es más bien una Wheat Ale y como tal me ha gustado porque me parece muy original y que combina lo mejor de dos mundos, el anglosajón y el germano.

Como veis, en Dublín hay para rato, seguiremos informando...

martes, 18 de septiembre de 2012

Ojito con Dublín...


Queridos amigos, vengo a relataros la que ha sido mi primera experiencia cervecil en la capital de la isla esmeralda. Hace unos años tuve la suerte de poder haber estado por aquí y, aunque ya profesaba amor por nuestro querido y líquido elemento, reconozco que no tuve la oportunidad de probar mas que los intentos de competencia que tiene Guiness a nivel local, lease Beamish o Smithwick´s, más una ligera experiencia en dos brewpubs, la Franciscan Well, sito en Cork y Messrs. Maguire, en Dublín, sinceramente, nada sobresaliente. En esta ocasión he tenido más suerte porque, además de que en este tiempo transcurrido, las microcervecerías han surgido casi como setas aquí, también han abierto muchos bares y, sobre todo, me he informado mejor, todo sea dicho.





Cerveza. Porque uno no arregla los problemas del
mundo con una copa de vino blanco...

El caso es que por las referencias obtenidas y cercanía, después de darme un garbeo por la city, como toma de contacto, me acerqué al Against The Grain, un bar bastante céntrico cuya puerta ya avisa de lo que nos vamos a encontrar dentro...

El sitio está muy bien, tranquilito, con la típica barra que les mola tanto a los anglosajones, con taburetes altos para que el que va solo, como es mi caso, pueda hablar un buen rato con el camarero. Nada más entrar vi la selección de grifos (son un total de 20, contando con una bomba de mano) que podéis ver en la foto de abajo y justo empezó a sonar el Dark side of the moon de los Pink Floyd, durante un momento creía que había llegado al paraíso.

Ni corto ni perezoso me senté en una de esas sillas altas antes mencionadas y le dije al camarero que quería probar alguna exquisitez local, me sugirió pedir una muestra como la que se ve en la foto y empecé con las recomendaciones del camarero:

La Bohemina Pilsner de 8 Degrees, una cerveza de un color dorado oscuro, nada turbio, carbónico medio, poca espuma, aroma escaso, en el que predomina el grano, entra bien en boca, aunque tiene poco cuerpo, final seco. Eso si, muy refrescante y bien hecha, pero poco mas...

La Irish Red de Galway Bay, de color castaño rojizo claro, nada turbia, con poca espuma, de color beige y poco carbónico. El aroma era muy escaso, demasiado ligera y suave, algo de caramelo y grano, pero bastante bien hecha.

La siguiente víctima fue la Dark Arts Porter, de Trouble Brewing, una porter de un color marrón muy oscuro, casi negro, con cierto carbónico, poca espuma, de color blanco, aroma a café ligero y algo de torrefacto, suave y poco complejo, cuerpo medio y sabor bastante largo, aunque más bien secote.

Aunque se supone que este tipo de oferta es para luego elegir la cerveza que te vas a tomar en pinta, yo preferí pedirme otra de estas muestras, ya que es más económico y no quería salir a cuatro patas. En esta ocasión solo 1/3 fue producto local, el resto, manjares varios:

La Golden Ale de Trouble Brewing (otra vez again) de color dorado, nada turbio, carbónico muy abundante, corona igualmente abundante, persistente y consistente, de color blanco, aroma más bien dulzón, como a miel, cuerpo medio, predominantemente dulce.

La siguiente elegida fue la Kipling, que la tenían en cask, así que no me pude resistir: una american pale ale muy bien hecha, de un color dorado turbio, con poca corona, seguramente porque el camarero no era muy ducho en el arte del manejo de las bombas de mano, con un aroma intenso a hierba fresca, pino y resina, cuerpo medio, mas bien seca, mucho pino en la boca, resina, amarga, de sabor muy largo. Aparte de la espuma, que no retenía, igual estaba un poco caliente de mas, pero bueno, eso ya son gustos...

Por último, la Sierra Nevada Northern Hemisphere Harvest Wet Hop Ale, así es queridos amigos, un auténtico pepino, de color dorado, con poco carbónico, poca espuma, de color beige, aroma intenso a lúpulo, muy limpio, pero con una clara base maltosa, que en la boca se convertía en un sabor a caramelo pero seco y con muchos matices florales. Me recordaba a la TIPA de Emelisse pero más baja de todo, de alcohol y de amargor, una delicia.

Como veis, aquí saben lo que se hacen, no sólo hay Guiness, así que, ojito con Dublín...

viernes, 14 de septiembre de 2012

Cata vertical de Pannepots

Se entiende por cata vertical aquella que se lleva a cabo sobre un mismo producto de distintas añadas, en este caso con Pannepots, de la archiconocida cervecera flamenca De Struise Brouwers. Las cervezas catadas y comparadas fueron: Pannepot 2010, Pannepot Reserva 2009 y Pannepot Grand Reserva 2008. La primera de ellas es la versión básica, una ale belga, muy oscura y muy especiada, casi se podría decir que es una cuádruple. La Reserva 2009 es la misma cerveza, pero envejecida durante catorce meses en barricas de roble francés. La Grand Reserva 2008 es la Reserva, pero con una guarda añadida de diez meses en barricas de Calvados, una aguardiente propio de la Normandía, resultado de la destilación de la sidra. el nombre de la cerveza procede de un pequeño pueblo costero de Flandes, llamado De Panne, conocido por unos pequeños barcos que se utilizaban para pescar en la zona y por una cerveza oscura y especiada que solían tomar esos mismos pescadores, de ahí la leyenda que pone en la botella de "Old Fishermen Ale". Al margen de esto, como información objetiva, sólo hay que añadir que todas tienen 10% de ABV y que todas tienen un 100/100 en Ratebeer.

Dicho todo esto, se podría decir que no es una cata vertical en sentido estricto y en parte es cierto, ya que no es exactamente la misma birra, tienen distintas formas de envejecimiento que le dan distintos caracteres, lo suyo sería hacerla, por ejemplo, con la Pannepot estándar, pero de distintos años, así se apreciaría mucho mejor como evoluciona la misma cerveza.  Lo que si sacamos, claramente, es ver como evoluciona una misma cerveza, en distintas maderas, lo cual es igual de interesante, o mas.

Todas ellas tienen un color castaño muy oscuro, casi negro, pero con pequeños reflejos rojizos, del estilo de algunas cuádruples, como la Rochefort 10. La diferencia entre las birras es que cuanto más antigua era, tenía menos carbónico y menos espuma, estaban ligeramente más apagadas, como se puede ver en ambas fotos.
Vista aérea

El aroma de la Pannepot 2010 es complejísimo y bastante intenso, más de lo habitual en las cuádruples, predominan las frutas oscuras, como las ciruelas o las pasas, pero también se nota mucho bizcocho, especias, canela, frutos secos, avellanas, ligero torrefacto y hay que reconocer que tiene un punto alcohólico considerable. En la Reserva el aroma es, básicamente, el mismo, pero menos alcohólico y sobre todo, un poco más apagado, más ligero, pero igual de complejo. Con la Grand Reserva ya cambia un poco la cosa, se acentúa un poco lo que habíamos notado en la 2009, pero más exagerado, en este sentido, los mismos aromas pero más sutiles aún y destacando un contrapunto muy interesante, el de la manzana producto de la guarda en los barriles de Calvados, parece que no pero se nota bastante y le pega mucho, le da un puntito fresco que aligera el aroma...

La ganadora
Si la cosa pintaba bien, la sensación en la boca ya es algo exagerado, la versión normal es una auténtica sinfonía de sabores, mucha fruta oscura, bastante torrefacto, especias, frutos secos, bizcocho, tiene muchísimo cuerpo y una textura oleosa. Ya la he probado muchas veces, pero por ello no deja de gustarme y sorprenderme. Al igual que en la nariz, el alcohol está bastante presente. La Reserva es bastante diferente, más asentada, menos agresiva, también con los mismos sabores, mas el matiz terroso de la madera, pero sobre todo mucho más redonda, más equilibrada, los sabores están presentes pero no son tan intensos, porque, desde mi punto de vista, ese puede ser el fallo de la Pannepot, que es demasiado, demasiados sabores y matices, tanto que no puedes percibir, separar y advertir cada uno, un poco como me pasaba el otro día con la colabo de Cigar City y Mikkeller. Por último, la Grand Reserva, como se ve por la progresión en lo antes comentado, esta cerveza también tenía esas mismas características pero con más cuerpo aún, mas sedosa, mas redondeada aún, más equilibrada y más sutil, nada alcohólica, y sobre todo con ese punto de la manzana, tan extremadamente agradable, que ayuda a pasar un poco la cerveza y a hacerla más ligera. Por todo esto, si tuviese que quedarme con una de las tres me quedaría con esta última.

 Como conclusión final sólo me queda decir que este tipo de catas es una gran experiencia, muy enriquecedora, se disfruta mucho de ello y sobre todo se aprende mucho. Si alguien quiere leer otras opiniones sobre las Pannepot puede hacerlo en Una cerveza al día o en Hipos Urinatum.

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Haandbryggeriet Sundland Kreosot

Cerveza: Sundland Kreosot
Cervecera: Haandbryggeriet (Noruega)
Tipo: Black IPA
Apariencia: color negro oscuro, completamente opaco, carbónico escaso pero presente, corona beige oscura, compacta y persistente.
Aroma: complejo pero sutil, predomina el torrefacto y café, pero tiene un puntito fresco, ligeramente herbal y ahumado.
Sabor: igual que el aroma, complejo pero sutil, nada exagerado, ligeramente maltosa, pero seca a la vez, no muy amarga. Bastante cuerpo, textura sedosa. Están presentes los sabores cafetosos, torrefactos, algo de amargor y humo. Alcohol muy bien integrado. Retrogusto a café muy largo.
Maridaje: salchichas ahumadas.
Vaso recomendado: pinta o tulipa.

 IBU: 80
 ABV: 6,5%

Ratebeer: Overall 97/ Style 89

Opinión personal: es una cerveza muy interesante, muy bien hecha y sobre todo muy equilibrada, a priori una Black IPA o India Black Ale (como dicen ellos) y encima ahumada, es un conjunto de sabores demasiado complejo en el que sería muy dificil entender o abstraer cada uno de ellos, pero al ser todos ellos sutiles, se armonizan entre si, permitiendo a estar todos presentes sin destacar demasiado, sin por ello perder matices o complejidad. En lo de la denominación de Black IPA o no, no me voy a meter, sólo que yo la llamaría Black Ale o algo así, porque tampoco es una stout... pero bueno, el caso es que es sorprendentemente fácil de beber, a pesar de esa complejidad teórica que tiene sobre el papel. Como curiosidad hay una cervecera que tiene el mismo nombre en Dinamarca, significa "Cervecera la mano" o algo así. Me la tomé en el Pedal.
Nota personal: General 94/ Estilo 91

lunes, 10 de septiembre de 2012

L’anjub Lug

Cerveza: Lug
Cervecera: L’anjub
Tipo: Bitter
Apariencia: color amarillo pajizo turbio, poco carbónico, corona abundante, poco consistente y poco persistente. Aroma: intensidad media, sutil pero agradable, herbal, fresco y ligeramente cítrico.
Sabor: cuerpo medio-bajo, amarga y seca, notas herbales, muy refrescante y fresca, presencia ligera de levaduras. Alcohol muy bien integrado.
Maridaje: quesos ligeros.
Vaso recomendado: pinta.

IBU: 42 ABV: 3,5%

Opinión personal: para ser una cerveza con tan poco alcohol es espectacular, es de las mejores que he probado con tan poca graduación, no parece nada aguada y tiene mucho sabor. Quizá un poco descompensado el amargor, pero muy bien hecha, entra muy bien y como no tiene mucho gas ni alcohol, se podría beber en cantidades importantes. esta cerveza la recibí a través de Birrabox y si alguien quiere tener otra impresión puede leerla en el blog de Una cerveza al día.
Nota personal: General 76/Estilo 81

viernes, 7 de septiembre de 2012

Caleya Asturies Pale Ale

Cerveza: Asturies Pale Ale
Cervecera: Caleya
Tipo: Pale Ale
Apariencia: color dorado, poco turbio, bastante carbónico, corona blanca no muy compacta pero si persistente.
Aroma: aroma muy abundante, limpio, frutas tropicales, melocotón y mango, algo herbal y notas cítricas.
Sabor: cuerpo medio, presencia del carbónico, entra muy bien, gusto amargo, ligeramente resinoso y herbal, final seco, muy refrescante. Alcohol muy bien integrado. Retrogusto largo.
Maridaje: comidas picantes.
Vaso recomendado: pinta o shaker.

IBU: 32
ABV: 4,5%

Opinión personal: muy buena pale ale, amarguita, refrescante, pero equilibrada, desde luego muy bien hecha, muy bien acabada. Sin lugar a dudas una gran cerveza de sesión. Hace relativamente poco que hablé de esta nueva cervecera, muy interesante, creo que va a dar mucho que hablar. Por cierto, para los más exigentes, viene toda la información en la etiqueta, utilizan maltas Pale Ale y Crystal, lúpulos Warrior, Cascade y Summit y agua del Parque Natural de Redes. Además de toda esta información objetiva, aparece en la etiqueta un pequeño texto muy interesante, escrito en bable que empieza diciendo: "Creemos na creatividá como motor del mundu y na creación artística como ferramienta pal cambiu [...]" No puedo estar más de acuerdo...así que me voy a tomar otra.
Nota personal: General 91/Estilo 96

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Agullons Edgard


Cerveza: Edgard
Cervecera: Agullons
Tipo: American Pale Ale
Apariencia: color anaranjado bastante turbio, nivel medio de carbónico, corona de color beige claro, escasa pero persistente.
Aroma: intensidad media, sencillo pero muy bueno, predomina la fruta, melocotón y uva, ligeramente floral.
Sabor: cuerpo medio, muy refrescante pero no seco, aunque tampoco dulce, retrogusto bastante largo, bastante afrutada, algo herbal, presencia de las levas, pan y galleta, alcohol muy bien integrado.
Maridaje: pescado blanco o verduras a la parrilla.
Vaso recomendado: pinta o shaker.

ABV: 5%


Opinión personal: cerveza muy bien hecha, muy equilibrada y compensada, entra muy bien. Sería perfecta como cerveza de sesión, al no tener demasiado grado alcohólico ni carbónico y no tener un sabor muy excesivo pero si cierto matices. Vamos que me la bebía por barriles! Por cierto, es monovarietal de Pale Ale y Cascade y la tienen en El Pedal.
Nota personal: General 84/Estilo 93

lunes, 3 de septiembre de 2012

Mikkeller/Cigar City Swinging Harry Tropical Quad

Cerveza: Swinging Harry Tropical Quad
Cervecera: Mikkeller/Cigar City
Tipo: cuádruple
Apariencia: color marrón oscuro, ligeramente turbia, carbónico escaso pero presente al principio, luego desaparece, corona escasa, de color beige, consistente pero poco duradera y deja el cristal completamente impregnado.
Aroma: intensidad media pero altísima complejidad, predomina la fruta de dos maneras, en un primer momento las tropicales y maduras, tipo mango y a continuación frutas oscuras, como pasas e higos. Se nota algo la levadura, un poco a cognac o brandy, nota alcohólica, que va disminuyendo con el paso del tiempo gracias a que la copa hace su función. no se nota nada funky.
Sabor: muchísimo cuerpo, muy complejo, primero destaca la combinación de las frutas tropicales y oscuras, luego se nota bastante el alcohol y al final predominan los sabores intensos y avainillados del cognac, lo cual hace que recuerde un poco a algunas barley wines europeas. No se nota nada amarga ni seca, es más bien dulce pero tampoco excesivamente, no empalaga.
Maridaje: como digestivo
Vaso recomendado: cáliz trapense.

ABV: 11,4%

Ratebeer: Overall 95/Style 74
Opinión personal: gran cerveza, extremadamente compleja, muchos sabores y matices, muy bien hecha, pero no llega a saturar, eso si, hay algunos sabores o matices que se esperaban en la fiesta y al final no han aparecido. Como decía JAB en un comentario de Facebook, "es el universo cervecero condensado en una única botella", tiene de todo: malta y levadura de cuádruple, lúpulos de IPA, envejecida en barriles de cognac, como una Barley Wine, con papaya y mango y con brettanomyces, como una sour, por eso yo, muy nietzscheanamente la he llamado la Überbirra, algo así como la super-birra, porque tiene como un poco de todo. El problema está en que, como se ve en la nota de cata, falta la presencia de los lúpulos y de los brett, entonces, mi pregunta es ¿merece la pena "desperdiciarlos"? si no se nota... ahí ya cada uno... A pesar de todo, es espectacular, yo le tenía unas ganas tremendas, no me ha defraudado en absoluto y el diseño es el recopetín.
Nota personal: General 98/Estilo 93